Los snickers eran mis chocolates preferidos cuando niña y esta versión super natural, rica en antioxidantes, en fibra, en grasas saludables y con muy pocos ingredientes, es una verdadera delicia. Con dátiles, maní tostado, un poco de avena y chocolate oscuro. Qué podría salir mal? Los puedes refrigerar hasta por 10 días o congelar para disfrutar en pequeñas dosis. Ve el video con el procedimiento aquí
Ingredientes para 6 barras:
PARA EL CARAMELO DE DATILES
10 dátiles preferiblemente medjool, 200 gramos aproximadamente
1 cucharadita de extracto de vainilla
¼ de cucharadita de sal
1-2 cucharadas de leche vegetal (opcional)
PARA LA CAPA DE NOUGAT
1/3 de avena en hojuelas ligeramente tostada en una sartén
1/3 de taza de maní tostado
3 cucharadas del caramelo de dátiles
1/8 de cucharadita de sal
PARA TERMINAR
1/3 de taza de maní tostado picado grueso
200 gramos de chocolate oscuro al 65-80% picado
Sal marina en escamas
Cubre con papel para hornear un molde de 8 cm por 18 cm aproximadamente.
Para el caramelo de dátiles:
Dispón los dátiles en un tazón y cúbrelos con agua hirviendo. Déjalos en remojo por 10 minutos.
Escurre los dátiles (deben quedar sin agua pero húmedos) y pásalos a un procesador o picatodo con la sal y la vainilla. Procesa hasta obtener una crema homogénea. Si esta muy espeso, puedes añadir una o dos cucharadas de leche vegetal.
Para otros usos puedes añadir más leche vegetal con el fin de que quede más liquido pero para esta receta debe quedar firme. Reserva.
Para el nougat:
En el mismo procesador o picatodo, procesa la avena, el maní y la sal hasta que queden como arena gruesa. Pasa la mezcla a un tazón, incorpora 3 cucharadas del caramelo de dátiles y forma una masa con los dedos. Extiende esta masa en el fondo del molde forrado hasta formar una capa uniforme.
Sobre la capa de avena y maní extiende el caramelo de dátiles restante. Cubre con el maní tostado y picado toda la superficie. Presiona el maní para que quede bien incrustado en el caramelo de dátiles. Lleva el molde al congelador por 1 hora.
Saca del congelador, desmolda y corta en barritas, deben salir 6 barritas. Lleva nuevamente al congelador.
Para terminar:
Derrite el chocolate al baño María. Saca del congelador una barrita a la vez para que se conserven bien frías. Pasa cada barrita por el chocolate derretido, rotándola con la ayuda de dos tenedores o de una espátula pequeña y asegurándote de que quede cubierta de chocolate por todos los lados. Si el chocolate se te endurece lo puedes poner unos minutos al baño María nuevamente. Pasa las barritas cubiertas a una lata forrada con papel para hornear. Rocía cada barrita con una pizca de escamas de sal marina.
Cuando hayas cubierto todas las barras, lleva la lata a la nevera por 5 minutos mínimo antes de servir. Puedes guardarlas en la nevera hasta por 10 días o congelar. Disfrútalas!