Los noodles fríos con salsa de maní son un clásico de la cocina oriental que encanta por su mezcla de sabores y texturas.
Este plato lo puedes convertir en una comida completa con la adición de tofu o pollo salteado.
Como estos noodles se comen fríos o a temperatura ambiente son ideales para llevar en la lonchera o a la oficina.
Para la salsa
5 cucharadas de mantequilla de mani natural
3 cucharadas de sasa de soya
1 cucharadita de jengibre rallado
Una pizca de ajo machacado
1 cucharadita de aceite de ajonjolí tostado
2 cucharaditas de miel de abejas o miel de maple
1 cucharada de jugo de limón
Gotas de salsa de ají al gusto
Fideos
180 g de espaguetis o fideos ( pueden ser sin gluten)
1 taza de Pepino pelado, cortado en medias lunas
1 taza de kale cortado en tiras fino
½ taza de zanahoria en julianas finas
2 cucharadas de cebolla larga en rodajas
Hojas de cilantro
1/3 de taza de mani tostado picado
Cocine los espaguetis siguiendo las instrucciones del paquete.
Mientras tanto prepare la salsa.
En un tazón mezcle todos los ingredientes con un batidor de alambre hasta formar una pasta homogénea.
Incorpore dos cucharadas de agua caliente para que la salsa quede un poco menos espesa.
Mezcle los espaguetis con los el pepino, el kale y la zanahoria. Incorpore la salsa y al final adorne con hojas de cilantro, cebolla larga en rodajas finas y maní tostado.
Puede guardar en la nevera hasta por 2 días.